lunes, 27 de abril de 2009

Heráclito desde una hoguera

De los mudras construidos por las cruces en la arcilla
miríadas de monjes surgen ataviados con colores primarios
en procesión hacia donde los seres se extinguen.
Salamandras bailadoras en el templo de Vulcano
indujeron secuestrarlas al muy noble Prometeo
y una vez entre los hombres procrear niños y monstruos.
Ímpetu de Zoroastro, calor luminoso,
puente entre los soles de arriba y adentro:
hipnóticas sierpes
develadas desde Heráclito al big bang,
es el mismo caduceo
envainado en mi espinazo,
es la misma luz caliente
de mi ira y de tus besos
es el fuego de los mantras
y la vida universal.

viernes, 24 de abril de 2009

Intuición

En la causa triangular de la naturaleza
(la ley, el amor y la forma)
te vislumbro al borde de lo posible
En los ensortijados trazos de la historia
(revolución, renacer, civilización y medievo)
te presiento
sobrepasando dolor y alegría
En las posiciones circulares del insomnio
(boca abajo, fetal creciente, plenilunio, fetal menguante...)
invento tu hogar en mi almohada
En las trazas inconscientes del poema
eres la princesa azul por venir
¡Oh Verdad!
no revelas tu belleza al espejo...
te quedas al filo de lo imposible

Viaje hacia un Ideal

(A Jorge Ángel Livraga y Leonardo Santelices)

Primera acción del navegante: concretar las ideas en papel
plegarlo debidamente
y hacer un barco donde cupiéramos todos
—origami puro—.
La brújula de los principios
—los que remiten al inicio del cosmos—
forjarla en nuestros relojes agregando un imán para orar.
La provisión: el pan de las perlas humanas
y el vino vertido por los dioses en el mito
así, borrachos de fe
—suelo del cielo—
segar encrespados oleajes
con el motor de los brazos cantores
hasta arribar a puerto inseguro: el Ideal
visible para el alma sola
porque las sombras de hueso habrán quedado en el mar.

Con el amigo lo que me reste de muerte…
con el maestro, a partir de la Vida.

domingo, 5 de abril de 2009

El caracol, la regla y el compás

Yo, nómada de la noche
recolecto en las selvas de los sueños
las raíces del hemisferio oriental
los frutos construidos por tus ojos
la madera del pensamiento al sol secado
agua suficiente para dos días
—si acaso el insomnio me plagiara desprevenido—
aire adicional por si fumaras penas
y un caracol para no perderme en la rutina

Yo, sembrador mañanero
tiro líneas con el semen del olvido
donde el caracol resbala cuesta arriba
y regreso en la tarde
con el compás de la espera
para otra vez preguntar si Dios es una esfera

Trabajos heroicos

Ser héroe es cuestión de un instante:
solo hay que hacer una ventana en la muralla
una puerta de la ventana
y abrir tantas puertas
hasta construir una muralla invisible

Ser héroe es cuestión de la vida entera:
solo hay que recibir de manos de la Historia
las llaves de la propia sepultura